Especificaciones de la receta

  • Porciones: 8 - 10
  • Tiempo de preparación: 20 minutos
  • Grado de dificultad: media
  • Tiempo total: 2 horas 30 minutos

Ingredientes de una buena receta

  • 250 g de margarina sin sal derretida y un poco más para engrasar
  • 250 g de galletas de leche trituradas
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 500 g de queso crema
  • 1 ½ taza de pulpa de guanábana
  • 1 ¼ taza de leche condensada
  • ½ taza de jugo de limón
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 3 sobres (21 g aprox) de gelatina en polvo hidratada
  • 4 claras de huevo
  • ½ taza de azúcar pulverizada
  • ½ taza de fresas partidas a la mitad
  • ½ taza de arándanos
  • Hojas de hierbabuena para decorar
  • 1 cucharada de aceite de palma para engrasar el molde

Preparación

Engrase un molde para cheesecake con un poco de aceite de palma.

Mezcle las galletas trituradas y la mantequilla derretida y ponga la mezcla en el molde presionando firmemente para formar la base.

Lleve 10 minutos al congelador.

Bata el queso crema con la ayuda de una batidora o de una espátula hasta que esté suave. Agregue la leche condensada poco a poco, la pulpa de guanábana, el azúcar y la gelatina deshidratada.

Vierta el relleno sobre la base de galletas, aplane la superficie con una espátula y lleve a la nevera durante dos horas.

Para decorar, bata las claras de huevo junto con la azúcar pulverizada a punto de nieve, cubra el cheescake formando picos con las claras y con la ayuda de un soplete queme un poco las claras para darle un lindo acabado. También puede dejarlas sin dorar.

Decore con las fresas, los arándanos y las hojas de hierbabuena.